¿Qué está pasando últimamente? No es la primera noticia sobre un smartphone que explota; en los últimos días nos hemos hecho eco de varias noticias donde se relata prácticamente lo mismo: terminales que explotan. A principio de mes, varios Xiaomi ardieron sin motivo aparente para que pocos días más tarde saltasen las mismas alarmas en Apple, ya que en este caso, un iPhone le explotó en la pierna un ciclista. Ahora, y sin finalizar el mismo mes, un Samsung Galaxy Note 7 explota mientras se cargaba.
El Samsung Galaxy Note 7 lleva sólo unas semanas a la venta por lo que la explosión de unos de estos dispositivos puede afectar en mayor medida el volumen de ventas de este terminal. Sin embargo, parece que ya hay un indicio del porqué el equipo ha salido calcinado. Cabe destacar, antes de nada, que en este caso no ha habido ningún herido.
El flamante nuevo Galaxy Note 7 de un usuario de la red social china Baidu ha salido ardiendo sin demasiados detalles de cómo sucedió el accidente. Su equipo era la versión coreana del phablet y parece ser que explotó mientras se estaba cargando con un adaptador microUSB a USB Tipo-C, podemos deducir gracias a una de las fotos adjuntas al post. Recordemos que el Galaxy Note 7 es el primer equipo de Samsung en incluir el conector USB Tipo-C.
En otras ocasiones, los adaptadores de enchufes de corriente (del chino al europeo, en la mayoría de casos) también han dado este tipo problemas, por lo que siempre se recomienda utilizar cargadores y adaptadores oficiales y/o con certificación europea. Del mismo modo, es conveniente mantenerlo en un lugar fresco y seco, evitando exponerlo a altas temperaturas y alejarlo del agua (sobre todo mientras se carga) aunque sea resistente a ella.
Los comentarios publicados en el tema donde se trata la explosión del equipo se pueden leer respuestas en tono jocoso al más puro estilo Forocoches. Desde “Mis condolencias al dueño, pocos días antes de su misteriosa desaparición” a “El Note 7 es el último bombazo de Samsung, ¿qué esperabas?” pasando por los típicos comentarios de “Gran noticia” o “Samsung, la primera marca de móviles capaz de freír”.
Sea como sea, cabe destacar que estamos ante un caso aislado: si un Samsung Galaxy Note 7 explota no significa que todos ellos lo vayan a hacer.
El Galaxy Note 7 monta una pantalla curva de 5,7 pulgadas a resolución Quad HD con tecnología Super AMOLED. Dentro se mueve un procesador Exynos 8890 Octa-Core más 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento interno, es decir, el mismo hardware del Galaxy S7.
Del S7 también hereda la cámara trasera BRITCELL de 12 MP y en la frontal realiza selfies de 5 MP. Como comentábamos antes, es el primer Galaxy en montar un USB Tipo-C que alimenta una (explosiva) batería de 3500 mAh con carga rápida.
Una de sus grandes características es su escáner de iris con el que podremos desbloquear el smartphone o acceder a álbumes de fotos privados, entre otras opciones. No falta a la cita el renovado S-Pen que ademas funciona hasta debajo del agua, ya que el equipo cuenta con protección IP68.
Todo el conjunto cuesta unos 849€ en Europa, y está disponible en color negro, plata y azul coral.
[PhoneArena, Baidu]
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