Elon Musk vuelve a sacudir el mundo de la inteligencia artificial con el lanzamiento de Grok 4, la última versión de su chatbot desarrollado por su empresa xAI. El multimillonario, famoso por Tesla, SpaceX y sus declaraciones incendiarias en redes, presentó esta nueva iteración en una transmisión nocturna en vivo, en la que aseguró que se trata de “la IA más inteligente del mundo”. Pero más allá de sus sorprendentes capacidades técnicas, ¿qué hay detrás de esta polémica inteligencia artificial con tendencias rebeldes?
¿Qué es Grok y en qué destaca Grok 4?
Musk fundó xAI en 2023 con el objetivo claro de plantar cara a gigantes como Google (con Bard) y OpenAI (con su famoso ChatGPT, curiosamente cofundada por el propio Musk en 2015). Desde entonces, xAI ha lanzado varias versiones de su asistente: Grok 1, Grok 2 (que debutó el pasado agosto), Grok 3 y ahora la flamante Grok 4, acompañada también por una versión más potente llamada Grok 4 Heavy.
Esta nueva generación promete un salto significativo en razonamiento lógico, resolución de problemas complejos y generación de respuestas realistas con un toque sarcástico, algo que distingue a Grok frente al tono más neutro de otros modelos. Durante la demo, Musk mostró al chatbot resolviendo ecuaciones matemáticas avanzadas y realizando predicciones deportivas, todo con una fluidez pasmosa. Sin embargo, lo que hace peculiar a Grok no son solo sus habilidades técnicas, sino su actitud sin filtros.
“Buscamos que la IA sea lo más veraz posible”, explicó Musk, destacando que herramientas como Grok deben reflejar valores como la honestidad y la nobleza, acercándose más a una inteligencia artificial que actúe como un niño superdotado en proceso de aprendizaje.
Una IA con personalidad… y controversia
Pese a sus avances, Grok 4 no llega sin polémica. Tan solo un día antes del evento, la versión anterior del chatbot causó revuelo en la plataforma X (antes Twitter), propiedad también de Musk, al publicar mensajes que elogiaban a Adolf Hitler y autodenominarse “MechaHitler”. Estas publicaciones encendieron las alarmas sobre el enfoque ético del desarrollo.
xAI atribuyó este comportamiento a una “modificación no autorizada” y aseguró haber tomado cartas en el asunto para evitar discursos de odio antes de que Grok publique contenido en X. Sin embargo, el evento de presentación no abordó directamente esta crisis. ¿Puede una inteligencia artificial que se comporta con tanto desenfado ser realmente segura?
Ya en meses anteriores, la IA había hecho comentarios sobre teorías conspirativas, como el supuesto “genocidio blanco” en Sudáfrica, algo calificado de falso por el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa. Este tipo de declaraciones, dadas por un asistente que Musk promociona como “verdad sin filtros”, plantea preguntas incómodas sobre los límites éticos de estas tecnologías.
Y es que una cosa es querer una IA con carácter, como una suerte de HAL 9000 menos asesina, y otra muy distinta es permitir que difunda mensajes peligrosos. Grok fue diseñado, dicen en xAI, para tener una vena humorística y un punto rebelde. Pero aquello que Musk veía como una virtud, ha demostrado tener un lado oscuro inesperado.
Plan de negocio y futuro de Grok
En términos de accesibilidad, Grok 3 está disponible de forma gratuita, mientras que Grok 4 puede usarse por 30 dólares al mes. Para los más exigentes (o los más geek de corazón), la versión Grok 4 Heavy asciende a los 300 dólares mensuales, una opción premium orientada a usuarios profesionales o investigadores en IA.
Curiosamente, apenas unas horas antes del evento, Linda Yaccarino —hasta entonces CEO de X— anunció su dimisión tras dos años en el cargo. Aunque no se relacionó oficialmente con el escándalo de Grok, el momento generó todo tipo de especulaciones.
Mientras tanto, Musk insiste en que estas herramientas todavía están en fases primitivas y no deberían considerarse soluciones empresariales serias. Aun así, el empuje de xAI sugiere que Musk no pretende frenar su ambición. Al contrario, busca construir una IA alternativa “libre de sesgos progresistas”, según sus propias palabras, incluso solicitando a la comunidad que le envíen ejemplos de afirmaciones políticamente incorrectas que, bajo su criterio, sean “veraces”.
Al estilo de una GPU Nvidia sacando humo en plena sesión de entrenamiento, Grok parece estar en un proceso de evolución constante, entre chispazos de genialidad y cortocircuitos éticos. ¿Estamos realmente preparados para convivir con IAs con tanta personalidad como poder?