Cuando Samsung lanza una nueva generación de su Galaxy Watch, los fans del ecosistema Android—y especialmente los que valoran su salud y bienestar—nos preguntamos lo mismo: ¿realmente vale la pena cambiar al último modelo? Con el Galaxy Watch 8 llega una renovada propuesta repleta de inteligencia artificial, mejoras sutiles en la batería y un diseño más fino. Pero su predecesor, el Galaxy Watch 7, sigue siendo una opción potente, especialmente ahora que su precio ha bajado considerablemente.
Diseño refinado y pantalla más brillante
Samsung ha pulido todavía más su fórmula ganadora con el Galaxy Watch 8, apostando por un cuerpo un 11% más delgado y un bezel cuadrado tipo «cushion» que no solo moderniza su estética, sino que también mejora la comodidad en la muñeca gracias a un sistema de lugs heredado del Watch Ultra. Ambos modelos siguen siendo auténticos todoterrenos, con certificaciones 5ATM, IP68, y MIL-STD-810H; es decir, resistencias de sobra tanto para el gimnasio como para tus escapadas extremas.
En cuanto a la pantalla, las diferencias se notan ¡y de qué manera! Aunque los tamaños y resoluciones son idénticos (1,5” y 480×480 píxeles en el modelo de 44mm y 1,3” y 432×432 píxeles en el de 40mm), el Watch 8 alcanza unos deslumbrantes 3.000 nits de brillo, superando los 2.000 del modelo anterior. ¿Quién no aprecia una pantalla hiperbrillante que se ve perfecta incluso bajo pleno sol veraniego?
Inteligencia artificial y salud: el gran salto
Si hay un apartado donde el Galaxy Watch 8 saca músculo, es el manejo de datos de salud potenciados por IA. Samsung ha llevado la experiencia más allá que nunca: ahora el nuevo reloj no solo mide tu ritmo cardiaco, calidad del sueño o SpO2, como ya lo hacía el Watch 7, sino que también analiza tus niveles de antioxidantes con un simple toque del dedo. Hablamos de métricas que normalmente exigen un análisis clínico y ahora están disponibles desde tu muñeca. Flipante, ¿no?
Además, ha mejorado su coach de sueño, que reconoce tus ritmos circadianos y te recomienda cuándo acostarte para optimizar tu descanso. También incluye un coach de running al más puro estilo del Asistente Virtual de entrenamiento de los Apple Watch, con pruebas de esfuerzo y planes personalizados para tus objetivos fitness. Mientras tanto, el Galaxy Watch 7 mantiene su interesante puntuación energética diaria basada en IA, aunque sin llegar a los niveles de detalle del modelo nuevo.
Y eso no es todo. El Galaxy Watch 8 también integra Gemini, la herramienta de IA generativa de Google, que puede responder preguntas, gestionar tus recordatorios o hasta mandar mensajes solo con tu voz. ¿Acaso no es el Jarvis de Tony Stark pero en versión reloj?
Mismo motor, rendimiento asegurado
Curiosamente, tanto el Galaxy Watch 8 como el 7 comparten el mismo procesador Exynos W1000, los mismos 2 GB de RAM y una generosa capacidad de almacenamiento de 32 GB. Es decir, a nivel de potencia bruta están prácticamente empatados, y ambos funcionan con Wear OS de Google, aunque el Watch 8 ya viene con la versión 6 y One UI 8 desde el primer momento. El Watch 7 recibirá estas actualizaciones, aunque perderá por el camino algunos de los florituras impulsadas por IA.
En cuanto a batería, Samsung ha aumentado ligeramente la capacidad: el modelo grande del Watch 8 sube a 435mAh y el pequeño a 325mAh. Esto se traduce, según la propia marca, en unas 40 horas de autonomía sin pantalla always-on y unas 30 con ella activada. El Watch 7 ofrecía entre 22 y 28 horas según configuración, por lo que la diferencia, aunque notable, no es revolucionaria.
¿Y el precio? Aquí es donde las cosas se ponen interesantes. El Watch 8 arranca en 349,99 dólares (unos 50 más que el Watch 7) y sube según tamaño y conectividad LTE. Pero atención, porque el Watch 7 suele estar en oferta—¡incluso a mitad de precio en eventos como Amazon Prime Day!—lo que lo convierte en una opción aún más jugosa por su relación calidad-precio.
Conclusión: ¿actualizar o no actualizar?
La gran ventaja del Galaxy Watch 8 reside, sin duda, en su integración más profunda con IA y su enfoque más ambicioso en salud y bienestar. Si eres adicto a los datos, amante de los últimos avances y quieres llevar el control de tu cuerpo al máximo nivel tech, el 8 es tu reloj. Pero si tienes un Galaxy Watch 7 (o incluso uno de hace un par de generaciones) que funciona bien y no te interesa tanto el tema AI, quizás no sea el momento de saltar aún.
En definitiva, Samsung ha hecho lo que Samsung mejor sabe hacer: refinar su producto estrella y llenarlo de detalles inteligentes que marcan diferencias sutiles pero potentes. ¿Preparado para dejarte guiar por tu nuevo entrenador de muñeca?