Dar el salto a una Nintendo Switch 2 tiene ese punto emocionante de estreno tecnológico: pantalla más grande, nuevas funciones y un rendimiento mejorado que, sobre el papel, hace que volver a tus juegos de siempre se sienta más fresco. Pero, en cuanto piensas en tus partidas guardadas, tus compras digitales y tu configuración, aparece la gran duda que todo el mundo se hace: ¿cómo paso todo lo importante desde mi Switch original sin liarla?
La buena noticia es que Nintendo ha preparado un proceso de System Transfer bastante directo para mover tu cuenta, perfiles de usuario, partidas guardadas y otros datos clave desde la Switch original a Switch 2. Si lo preparas con un mínimo de orden, puedes estar jugando en el nuevo hardware en muy poco tiempo, con tus títulos listos para descargar y tu Nintendo Account ya iniciada.
Antes de empezar: lo que conviene revisar
La transferencia no es complicada, pero hay una pequeña lista de comprobaciones que evita sustos de última hora, especialmente si eres de los que tiene una biblioteca digital considerable y no quiere perder tiempo con errores evitables.
Primero, carga ambas consolas y mantenlas cerca durante el proceso. Aunque suene básico, una interrupción por batería en mitad del traspaso es el tipo de “mini tragedia” que nadie quiere añadir a su sesión de estreno. También necesitas una conexión Wi-Fi estable, porque el sistema la utiliza para verificar la Nintendo Account y gestionar lo que luego tendrás que volver a descargar.
En la Switch original, asegúrate de instalar la última actualización del sistema. Esto ayuda a que la transferencia se ejecute sin interrupciones y reduce la posibilidad de encontrarte con comportamientos raros durante el emparejamiento entre consolas. Después, confirma que tu Nintendo Account está vinculada y que cada usuario que quieras mover está asociado a una cuenta de Nintendo; este detalle es el que marca la diferencia entre un traspaso limpio y un rompecabezas de perfiles.
Otro punto que conviene tener en mente: la mayoría de juegos de Switch funcionan en Switch 2, pero Nintendo ha indicado que un número pequeño de títulos antiguos puede tener problemas temporales de compatibilidad. Si tienes uno de esos juegos “de culto” que siempre vuelves a instalar, es buena idea consultar la lista de compatibilidad antes de migrar, para saber a qué atenerte.
Y sí, las capturas de pantalla y los vídeos deberían transferirse, pero si hay contenido que no quieres perder por nada del mundo, hacer una copia adicional antes de empezar puede ahorrarte disgustos. Es el típico movimiento de persona que ya ha aprendido que la tecnología es maravillosa… hasta que decide no serlo.
Cómo hacer el System Transfer de Switch a Switch 2
El proceso se inicia desde la consola antigua y se completa durante la configuración de la nueva. En tu Nintendo Switch original, entra en Configuración de la consola, ve a Usuarios y selecciona Transferir tu usuario y datos de guardado. A partir de ahí, eliges el perfil que vas a mover, confirmas la información de tu Nintendo Account y sigues los pasos que aparecen en pantalla.
Después, enciende la Switch 2 y realiza la configuración inicial. En un momento del asistente, la consola te preguntará si quieres transferir datos desde otro sistema: ahí debes elegir Iniciar System Transfer. Es importante que ambas consolas estén conectadas a la misma red Wi-Fi y permanezcan encendidas durante todo el proceso, ya que Switch 2 detectará la Switch original y te guiará para emparejar los sistemas.
Cuando la conexión entre ambas se establece, la Switch original empezará a enviar la información del usuario, los datos de guardado y ajustes. Al terminar, Switch 2 iniciará sesión automáticamente con tu Nintendo Account, y tus juegos digitales no “aparecerán mágicamente instalados”, pero sí quedarán disponibles en la sección de Redescargar de Nintendo eShop para que los vayas bajando según te convenga.
Este enfoque tiene bastante sentido: en vez de ocupar almacenamiento con todo tu historial de compras, te deja priorizar lo que quieres jugar primero, algo muy práctico si tu biblioteca es grande o si tu conexión no es precisamente de las que presumen en una comparativa de velocidad.
Qué se transfiere, qué no y qué hacer después
Lo más relevante es que el System Transfer mueve prácticamente todo lo que está vinculado a tu Nintendo Account. Eso incluye tus compras digitales, los datos de guardado, los perfiles de usuario, los controles parentales, determinados ajustes del sistema y también capturas de pantalla y vídeos. Además, tu suscripción a Nintendo Switch Online también se traslada, por lo que, al acabar, podrás empezar a redescargar tus juegos en la Switch 2 de inmediato.
En cuanto a los juegos físicos, las tarjetas de juego de Nintendo Switch funcionan en la nueva consola. Eso sí, algunos títulos pueden necesitar parches o actualizaciones para ofrecer el mejor rendimiento, y si detectas un comportamiento extraño en algún juego concreto, conviene revisar la lista de compatibilidad actualizada de Nintendo por si se trata de un problema conocido.
Ahora bien, no todo se copia automáticamente. Hay un par de detalles que tendrás que reconfigurar a mano en la Switch 2: el emparejamiento Bluetooth (tanto de mandos como de auriculares) se debe hacer de nuevo, ya que esas vinculaciones se quedan asociadas a la consola original, y las contraseñas Wi-Fi tampoco se transfieren, así que tocará volver a conectarte a tu red doméstica.
También puede ocurrir que ciertas preferencias específicas de algún juego, o ajustes como idioma o región, requieran una revisión rápida en la Switch 2. No suele llevar más que unos minutos, pero es mejor saberlo para no pensar que “algo se ha perdido” cuando en realidad solo está pendiente de reconfiguración.
Tras la transferencia, lo más práctico es entrar en Nintendo eShop y empezar a redescargar tus juegos digitales, priorizando los que vas a jugar primero. Es normal que notes descargas más lentas si el sistema pone en cola gran parte de tu biblioteca, así que organizar el orden te ahorra tiempo real. Luego, vuelve a emparejar tus Joy-Con, mandos o accesorios Bluetooth (si son compatibles con Switch 2) y aprovecha para actualizar juegos a su versión más reciente y restaurar ajustes de control parental o configuraciones familiares si las usabas.
Un matiz importante con el almacenamiento: si utilizas una tarjeta microSD, conviene esperar a que el System Transfer termine antes de insertarla en la Switch 2, porque la consola podría necesitar reformatearla. Y, sobre todo, no restablezcas de fábrica tu Switch original nada más terminar; mantenerla a mano y encendida te permite comprobar con calma que todo ha llegado bien antes de decidir si la guardas, la regalas o la preparas para vender.
